Día 4: Descanso para reponer fuerzas. Lo dedicamos a hidratarnos, secar las cosas, cargar las baterías con las placas solares en los momentos que nos pegaba el sol, y descansar. Aquí coincidimos con los rangers y con los chilenos por primera vez. Ya no estábamos solos en la montaña!
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Día 5: El día amanece bueno, y nuestra intención es no realizar el porteo típico a la windy corner, sino subir con las pulkas directamente al C-4, y así lo hicimos pese al esfuerzo que nos supuso subir las empinadas rampas que nos separan del 4. La fama de la windy corner la hemos sentido este año bien, ya que nos costó mucho el paso arrastrando pulkas. Casi se nos congela algún dedo de la mano y ahí están dos malagueños llorando como niños cuando la sangre caliente llega a la punta de los dedos. Arribamos en el campo 4 sobre las ocho y media y aprovechamos el primer agujero existente para montar la tienda.
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Este será nuestra casa de altura durante los próximos días. La temperatura aquí ronda -30º.
Día 6 y 7: Día de aclimatación y confraternización con el resto de expediciones que hay en el campo, aunque no muchas, en total unas 15 personas, donde normalmente en temporada suele haber unas 200.
Esa tarde la dedicamos a preparar lo que va a ser el porteo que vamos a realizar mañana.